Piragüismo y kayak
Experiencia de remo en Austria
En los cálidos días de verano, la canoa se desliza suavemente por los tranquilos paisajes fluviales de Austria. La bruma matutina se eleva sobre las llanuras aluviales, las libélulas danzan sobre el agua y el calor del día se mantiene agradable bajo la sombra de los árboles ribereños. En invierno, la experiencia cambia, pero es igualmente intensa: el aire fresco acaricia el rostro mientras la pala surca las aguas cristalinas y la escarcha adorna las ramas de las orillas.
Quien haya remado alguna vez por las aguas austriacas, ya sea en los brazos laterales de los ríos, en praderas encantadas o en lagos tranquilos, comprenderá por qué siempre ha existido una conexión especial con el agua. El deslizamiento constante, las vistas cambiantes y la cercanía a la naturaleza hacen que la vida cotidiana se desvanezca.
Las regiones más bonitas para recorrer en canoa y kayak
Excepcionales excursiones en canoa y kayak
Lo especial es el silencio en el centro del lago. Se tiene la sensación de estar completamente a solas con la naturaleza y los elementos.
Corinna Kuhnle, dos veces campeón del mundo de eslalon en canoa
Un poco de vocabulario
La palabra "kayak" proviene del groenlandés, donde originalmente se llamaba "qajaq", y hace referencia a una embarcación de remos originaria del Ártico. Este tipo de bote se impulsa con remos dobles, y los ocupantes se sientan en un asiento largo, orientado en la dirección de la marcha.
Para los inuit, el pueblo indígena de Groenlandia, los kayaks se cubrían inicialmente con pieles de foca, y sus estructuras eran de hueso de ballena. Estas embarcaciones pequeñas y ligeras eran perfectas para la caza, a diferencia de los umiaks, que eran barcos más grandes, usados para viajar, cargar bienes e incluso como tiendas de campaña cuando se colocaban boca abajo.