Senderismo junto al agua
Gargantas, barrancos y cascadas
El rocío de las cascadas austriacas posee una magia única: millones de diminutas gotas de agua danzan en el aire, mientras el rugido ensordecedor de la caída ahoga todos los demás sonidos. El aire, impregnado de musgo y piedra húmeda, está cargado de iones negativos y es tan puro que cada respiración se siente como una pequeña meditación.
Las cascadas tienen un poder curativo especial en las profundas gargantas de los Alpes, donde el agua ha labrado su camino a través de la roca durante milenios. Al seguir las estrechas rutas de senderismo que serpentean junto a los arroyos, cada paso disuelve el estrés diario, instaurando una sensación de calma profunda. Este fenómeno natural ha sido denominado "efecto cascada" por los científicos.
Las excursiones más bonitas por gargantas y barrancos
Las excursiones más bonitas a las cascadas
Consejos
La luz ideal:
Si hay mucha luz, es mejor hacer las fotos por la mañana o por la tarde, cuando el sol está bajo. Demasiada luz impide tiempos de exposición suficientemente largos. Si está oscuro, como en el bosque o en un desfiladero, es mejor favorecer el mediodía. Atención: ¡Un valor ISO demasiado alto produce un efecto granulado en la imagen!
Los ajustes de la cámara:
El efecto velo se consigue con una exposición larga (unos cuatro segundos): cuanto más larga, más "suave" se vuelve el agua. Sin embargo, una exposición demasiado larga puede hacer que no se vea ninguna estructura. Nunca sobrepases en más de dos pasos la exposición correcta
El trípode:
Para conseguir un efecto suave del agua, no dispares nunca cámara en mano. El trípode es indispensable para las exposiciones largas. Las patas de goma del trípode evitan que resbale sobre una superficie húmeda.